Post by Eidolon on Sept 28, 2024 20:53:25 GMT 1
Justo al acabar la guerra, mientras aquellos en el poder estaban ocupados en realizar y formalizar la nueva distribución regional y quienes se sentarían a regir el que... sobre montañas de cadáveres y con facciones enteras destruidas...... la vida continuaba para los supervivientes de la civilización, fueran campesinos en pueblos en reconstrucción recién regresados de huir a las ciudades, endurecidas familias de dura mollera en granjas a más distancia, burgueses y mercaderes que veían oportunidades comerciales entre ciudades muy devastadas y otras en mejores condiciones... tribus trasgoides experimentando lo que es la civilización a su manera.... y sobre todo de entre supervivientes, huérfanos, traumadas victimas... el surgimiento de nuevas mesnadas de iniciados mercenarios y aprendices de aventureros que tenían por delante regiones devastadas... baja población... lugares abandonados.. numerosas ruinas... pequeños misterios... y en general el resultado de conflictos apagados y humeantes que creaban oportunidades.
El establecimiento de la civilización tanto en la península como en el Valle del Elsir con la formalización de nuevas leyes, nuevas rutas entre grupos ahora muy necesitados... formaban interesantes opciones ahora.
-La peninsula era oportunidad para la mayoría de aventureros primerizos que tomaban armas de sus familias muertas y restos de armaduras de soldados perdidos en batallas para sumarse por las vacías regiones entre las ciudades.
-El Valle del Elsir.. ahora transitable ofrecía oportunidades y peligros para los que fueran con cuidado navegando la diferencia de leyes entre humanoides y violentos trasgoides.
-Tomándose navíos para aquellos con oro para permitirselo la misteriosa pero ahora más poblada de Nekrane ofrecían futuros conflictos... el Principado de Idvan empezaba a crecer en población, nuevas aldeas y enclaves de granjas fortificadas en caminos y costas empezaban a aflorar por parte de masas de refugiados adaptándose a sus nuevos señores feudales y grupos de milicias cerraban filas por los enormes peligros monstruosos de tales campos.
-Unos pocos de los más atrevidos... se adentraban a veces en el Bosque de la Inmensidad o pasaba el Valle del Elsir hacia los Desiertos centrales de Paugran.. los cuales hace poco dejaron de manifestar ya las extrañas disformidades temporales que años atrás la había azotado... se dice de poblaciones en los desiertos y conflictos acabados que dejaron la región algo más pacificada ahora.. de una forma no muy diferente a la peninsula. Sin embargo de cada 10 grupos de codiciosos pequeños grupos armados.. de esas regiones semanas y meses despues volvían como mucho 1 o 2... hablando de tesoros y grandes peligros.
-Incluso se decía de una colonia del Reino en las costas de unas tierras pantanosas al oeste de Nekrane... como lugar de aventuras para los más intrépidos de todos.
Mientras tanto el Reino aún debía adaptarse y muchos años estaban por delante para realizarse algún tipo de recuperación. Por poner algunos ejemplos;
-El Cruce las murallas exteriores eran ahora más fortificadas aunque habían dejado intactos los árboles que habían brotado de ellas. Mientras tanto en esta región de la Nación de la Garra Blanca podían verse Licántropos entre los guardias de la ciudad... lo cual podía ser sin duda intimidante para visitantes o comerciantes... que notaban como el salvajismo de estas gentes era a la par con el resto del valle del Elsir.
-En Bayas con apenas mil a dos mil supervivientes humanos y más o menos la misma cantidad de elfos... la ciudad era ahora silenciosa... con apenas 1 o 2 personas de cada 10 de las que habían antes en la ciudad. Mientras se buscaba una forma de ir recuperando la vitalidad de la casi apagada ciudad, la Casa Gonsadel había dado uso de místicos poderes para que las gentes de la ciudad plantaran multitud de árboles como recuerdo a sus familiares caidos... las ahora más densos parques repletos de pequeñas aves eraun consuelo pequeño pero presente para las heridas mentes de sus ciudadanos.
-En Talar trasgoides y humanoides se mezclaban.. aunque la violencia era visible para los no acostumbrados, aquellos con inteligencia y fuerza podían destacar pero para aquellos que no eran residentes del lugar la ciudad de momento solo era un punto de paso para algunos mercaderes y aventureros.
El establecimiento de la civilización tanto en la península como en el Valle del Elsir con la formalización de nuevas leyes, nuevas rutas entre grupos ahora muy necesitados... formaban interesantes opciones ahora.
-La peninsula era oportunidad para la mayoría de aventureros primerizos que tomaban armas de sus familias muertas y restos de armaduras de soldados perdidos en batallas para sumarse por las vacías regiones entre las ciudades.
-El Valle del Elsir.. ahora transitable ofrecía oportunidades y peligros para los que fueran con cuidado navegando la diferencia de leyes entre humanoides y violentos trasgoides.
-Tomándose navíos para aquellos con oro para permitirselo la misteriosa pero ahora más poblada de Nekrane ofrecían futuros conflictos... el Principado de Idvan empezaba a crecer en población, nuevas aldeas y enclaves de granjas fortificadas en caminos y costas empezaban a aflorar por parte de masas de refugiados adaptándose a sus nuevos señores feudales y grupos de milicias cerraban filas por los enormes peligros monstruosos de tales campos.
-Unos pocos de los más atrevidos... se adentraban a veces en el Bosque de la Inmensidad o pasaba el Valle del Elsir hacia los Desiertos centrales de Paugran.. los cuales hace poco dejaron de manifestar ya las extrañas disformidades temporales que años atrás la había azotado... se dice de poblaciones en los desiertos y conflictos acabados que dejaron la región algo más pacificada ahora.. de una forma no muy diferente a la peninsula. Sin embargo de cada 10 grupos de codiciosos pequeños grupos armados.. de esas regiones semanas y meses despues volvían como mucho 1 o 2... hablando de tesoros y grandes peligros.
-Incluso se decía de una colonia del Reino en las costas de unas tierras pantanosas al oeste de Nekrane... como lugar de aventuras para los más intrépidos de todos.
Mientras tanto el Reino aún debía adaptarse y muchos años estaban por delante para realizarse algún tipo de recuperación. Por poner algunos ejemplos;
-El Cruce las murallas exteriores eran ahora más fortificadas aunque habían dejado intactos los árboles que habían brotado de ellas. Mientras tanto en esta región de la Nación de la Garra Blanca podían verse Licántropos entre los guardias de la ciudad... lo cual podía ser sin duda intimidante para visitantes o comerciantes... que notaban como el salvajismo de estas gentes era a la par con el resto del valle del Elsir.
-En Bayas con apenas mil a dos mil supervivientes humanos y más o menos la misma cantidad de elfos... la ciudad era ahora silenciosa... con apenas 1 o 2 personas de cada 10 de las que habían antes en la ciudad. Mientras se buscaba una forma de ir recuperando la vitalidad de la casi apagada ciudad, la Casa Gonsadel había dado uso de místicos poderes para que las gentes de la ciudad plantaran multitud de árboles como recuerdo a sus familiares caidos... las ahora más densos parques repletos de pequeñas aves eraun consuelo pequeño pero presente para las heridas mentes de sus ciudadanos.
-En Talar trasgoides y humanoides se mezclaban.. aunque la violencia era visible para los no acostumbrados, aquellos con inteligencia y fuerza podían destacar pero para aquellos que no eran residentes del lugar la ciudad de momento solo era un punto de paso para algunos mercaderes y aventureros.